El idioma

Hoy por hoy aumenta el deseo de mucha gente de aprender nuevos idiomas. Estamos en la era de la comunicación. Las personas alrededor del mundo desean entender lo que ven y oyen en los canales de tv estadounidenses, ingleses, alemanes, franceses, italianos, chinos, japoneses, etc.

No solo en la tv esta la información sino también en los libros y aquí en la internet, como ahora mismo lo estamos haciendo a través de este blog. Sino logramos entender algo o comunicar algo con alguien nos sentimos atrazados o retrasados en cultura. Sentimos un estancamiento.

Un servidos es uno de los que quiere aprender idiomas. Pero hoy refelexioné algo. Hay un idioma que es el más importante que los ya mencionados y este es: El Amor de Dios.

Este es el verdadero idioma que debemos esforzarnos en entender y en expresar.

Estudio inglés desde la secundaria (osea hace 22 años), pero nunca lo he podido desarrollar de una mejor manera. Ustedes se preguntaran el por qué...pues porque nunca lo he practicado. Elemental mis queridos hermanos. Nunca me he dado a la tarea de hablarlo todos los días, aunque no lo haga de la mejor manera; mejor aún, no lo he vivido. Mi esposa Alejandra, quien tiene el 90% de inglés, me dijo una vez: cuando sueñes en inglés, ya la hiciste.

Saben que ese es el mayor problema del cristiano. Vamos a la iglesia a aprender el idioma del Amor de Dios pero como nunca o poco lo ponemos en practica, no lo hablamos, no lo soñamos...dificilmente lo podremos verdaderamente aprender.

Filipenses 2
1 Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna misericordia,

2 completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa.

3 Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo;

4 no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros.

5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús,

6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,

7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;

8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.


Gott segne euch.
Бог благословит вас.
God bless you.
신의 은총이 함께 하시길
Dieu vous bénisse.
上帝保佑你
Deus o abençoe.
Dios te bendiga.

Dios está ahí también

"Un día vinieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también Satanás. Y dijo Jehová a Satanás: ¿De dónde vienes? Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: De rodear la tierra y de andar por ella"

Platicaba hace unos días con uno de mis amigos acerca de este texto y comentabamos que el enemigo de las almas, quiere hacernos ver esto: que él es el dueño de nuestras vidas por el solo hecho de vivir en este mundo.

El enemigo pudiera reynar en este mundo pero no en la vida de los hijos de Dios. Aquellos que hemos aceptado por fe en la salvación de Jesucrito nuestro Dios no tenemos por que atender a estas palabras.

Podemos quedarnos sin casa, sin comer, sin carros, sin familiares, sin amigos, sin nada; pero lo que sí podemos decir es que: Nos queda Jesús en nuestro corazón, nos queda la fe en Dios, el cual vendrá por nosotros un día muy pronto.

Dios ha permitido que la ciencia aumente para ver más de cerca la maldad y el olvido que hay de Él en las peronas de este mundo. Pero nosotros no somos de este mundo; no tenemos por que también quedarnos sin la paz que solo Dios da.

Si la inseguridad está presente a cada instante de la vida, Dios también lo está. Él esta ahí observandonos y cuidandonos a cada momento de nuestra vida al igual que sus ángeles.

No se te olvide: "y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén" Mt. 28:20